jueves, 8 de noviembre de 2012

Dos poemas que llevo conmigo – Caso Nominativo y Poema II de Trilce

Hay palabras que se le quedan grabadas en las fibras más sensibles a uno y empiezan a definirlo como persona.  Algo de eso me pasó cuando era adolescente y hoy, sentado aquí frente al monitor, me dije que, a manera de terapia, aprovecharía para comentarlas y hacer un poco de catarsis.


En verdad son más de dos mis poemas favoritos, pero hay dos poemas de autores peruanos se han hecho carne en mí y los llevo conmigo donde voy. El primero de ellos lo aprendí cuando tenía trece años y lo recuerdo a veces cuando camino por las calles meditabundo y cabizbajo. Su nombre es Caso Nominativo y su autor Jorge Eduardo Eielson. El segundo tiene que ver con mi época escolar, etapa digna de olvido, de no ser porque en ella mi profesor de Literatura —un hippie castigado por el sistema—, nos leyó, entre otras obras geniales, el poema II de Trilce.

Sin más, aquí los comparto:

Jorge Eduardo Eielson
Caso nominativo
todavía no todavía
el cielo se llama cielo
el perro perro
el gato gato
todavía mi nombre es jorge

¿pero mañana
cuando me llame perro
el perro jorge
el gato cielo
el cielo gato?

¿mañana
cuando tu pierna se llame brazo
tu brazo boca
tu boca ombligo
tu ombligo nada?
Jorge Eduardo Eielson
César Vallejo


             II

          Tiempo Tiempo.
Mediodía estancado entre relentes.
Bomba aburrida del cuartel achica
tiempo tiempo tiempo tiempo.

          Era Era.

Gallos cancionan escarbando en vano.
Boca del claro día que conjuga
era era era era.

          Mañana Mañana.

El reposo caliente aún de ser.
Piensa el presente guárdame para
mañana mañana mañana mañana

          Nombre Nombre.

¿Qué se llama cuanto heriza nos?
Se llama Lomismo que padece

nombre nombre nombre nombrE.
César Vallejo