lunes, 14 de marzo de 2011

Salvemos nuestras tradiciones - De la marinera a la comida

Hace poco vi un documental muy bueno referente a la marinera trujillana, aquella marinera norteña de zapateo firme y corajudo que alguna vez nos hizo emocionarnos y que hoy simplemente está pasando al olvido, se le ha arrinconado y se le han tapiado las salidas tras un muro de academias de baile estilizado, refinado y elitizado…

Pero de otro lado hoy podemos ver un concurso pomposo que crece inversamente proporcional al baile tradicional… Avanzamos, qué alegría, ahora bailan en Miami, en otros países, ¿y nuestra tradición? Bien, gracias en un rincón de anticuario…



Esto mismo puede pasar con nuestra comida, si bien ahora contamos con impresionantes escuelas de cocina D`Gallia o la USIL por citar algunos lugares, es preocupante que algunos muchachos se dejen enamorar por la idea de la fusión y dejen de lado nuestra comida, esa de las abuelitas, de las señoras de los mercados, que privilegien las técnicas modernas y consideren barbarie todo lo nuestro. Señores, tengamos en cuenta que lo que tenemos aquí, eso que hacían nuestras abuelitas es nuestra técnica. Desde muchos frentes hemos estado enfrentando los riesgos de la globalización, en el campo cultural decimos que reconocemos que una cultura no es mejor que otra, ya nadie en su sano juicio emite el exabrupto de considerar que hay civilización y barbarie, esas taras deben quedar de lado y nuestra cocina no puede ser la diferencia, no perdamos aquello que teníamos. Hace no mucho comenté que el cebiche ahora se hace al estilo sashimi, y está bien si es cuestión de gustos , pero no puede ser la pauta exclusiva y pretender que hacer un cebiche a la antigua (con el pescado «cocinado» en jugo de limón por unas horas) es sencillamente deleznable… No pensemos que todo lo extranjero es mejor, ahí empiezan nuestros errores.


---
Adjunto parte del documental en YouTube

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Exprésate