martes, 15 de marzo de 2011

¿Bullying? – de Paco Yunque a Clinton Maylle y de Humberto Grieve a los «achorados»

Le han puesto el nombre de Bullying* a ese fenómeno de vieja data que fue plasmado por César Vallejo en Paco Yunque. Un niño o muchos niños abusando de otros. En nuestros días el abusado se llama Clinton Maylle, niño golpeado hasta quedar cuadripléjico, y su único crimen es ser un migrante de la sierra peruana, un descendiente de los incas, de los waris de los que tanto nos preciamos… Los victimarios no son los hijos del adinerado Grieve como en la historia vallejiana, sino sus compañeros de aula, unos jovenzuelos sin autoestima ni identidad, que lo golpean por parecerse a ellos, porque en sus poco desarrollados cerebros creen que al golpearlo y ponerle sobrenombres se distancian de él. Sí, en nuestro país el mal llamado Bullyng es resultado del complejo de inferioridad.

¿A quién golpean esos pobre diablos que le pegaron a Clinton? No es a Clinton, sino a sus padres migrantes, a sus abuelos que anduvieron en ojotas y de los que por cierto sienten vergüenza. Para muestra basta un botón, la madre del niño que golpeó a Clintón se llama María Huaroc**.

Hace poco una señora, cuya familia procede de la sierra de Áncash —per o que se ha establecido en Comas ya desde hace un par de décadas— me contaba que a su hija le da vergüenza cuando viene su abuelita porque la señora anda con polleras y sombrero… eso mismo les pasa a esos pobre diablos. El problema es que nuestro sistema no les enseña a sentirse orgullosos de ser quienes son, ellos han crecido creyendo que son herederos de una tradición de hombres torpes y que para salir de allí deben ser diferentes y la mejor forma que encuentran es golpeando a niños como Clinton, sin darse cuenta que son idénticos a él solo que «achorados».

El achorado es aquel sujeto que se comporta matonescamente y con ello se diferencia del sumiso hombre andino, al menos eso nos dijeron los conquistadores españoles de la época colonial, quienes consideraban a los pobladores del Ande como hombres rudos de poco entendimiento, es decir tipos fuertes pero con el cerebro de un niño.

Es triste que en épocas en que el mundo admira Sipán, en que Machu Picchu es una maravilla del mundo moderno, en que se descubre que tenemos una ciudad tan antigua como Ur o Lagash (Caral) y en que el sinnúmero de descubrimientos como el Señor de Wari, la Dama de cao o los murales recientemente descubiertos por Walter Alva concitan interés de científicos afamados, los descendientes de aquellos lejanos hombre del mundo andino sientan vergüenza de ser quienes son.

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*Ponerle ese nombrecillo es un poco como propiciar el asunto, pero en fin así lellaman.
**Al respecto revisar la historia de Clinton con más detallen el esta página de El Comercio, donde además se comenta la existencia de tres casos anteriores de maltrato infantil en Perú.
***Foro «cortesía» de El Comercio.

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