sábado, 21 de marzo de 2015

Huacho, paraíso de la histórica naranja agria

Hace no mucho conversaba con mi buen amigo, e historiador, Miguel Ángel del Castillo, cuando sin saber por qué llegamos a hablar de comida.

—¿Sabías que el cebiche en la colonia no se hacía con limón? —me dijo muy entusiasta Miguel.

En ese tiempo yo, comelón por excelencia, estudiaba unos cursos de cocina, así que intrigado repliqué la pregunta.

—¿Y entonces con qué lo hacían? —inquirí intrigado.

—Con naranja agria —respondió mi buen amigo.
Un camino en la campiña huachana

He contado esta breve historia, porque me da pie para hablar de lo que aquí nos interesa, si en Lima un día el cebiche se hizo con naranja agria, esa costumbre se perdió, pero aún persiste en Huacho, a solo dos horas de Lima.

Los otros cebiches
Claro, cebiches hay muchos, desde América del Norte hasta Tierra del Fuego, pero el cebiche huachano es especial por dos cosas, la primera es que se hace con naranja agria (aunque hoy en día quizá ya están usando más limón, pero yo hace unos treinta años lo comí más de una vez hecho de naranja agria), y la segunda es que, además, ha creado una versión caliente del fresco plato, el famosísimo cebiche de pato (receta aquí).

         Me cuenta mi madre, huachana hasta el tuétano, que hay dos variedades que ellas tenían en su huerta de Cruz Blanca, una pequeña como una mandarina y la otra, la más grande como naranja de jugo, y cuyo nombre es Citrus  aurantium, la cual, basta googlearla, para ver que cura tantas enfermedades como el chía.

Sea como sea, si se da usted una vuelta por Huacho, amable lector, vaya a la campiña, pida un cebiche de pato o uno de pescado hecho con naranja agria, no se arrepentirá.